Ya sabemos la importancia de llevar una alimentación balanceada, sin embargo, ponerlo en práctica puede ser complicado en el día a día. Por eso, te dejamos un par de tips para lograr que tus pequeños se acostumbren a una dieta balanceada sin la necesidad de ser restrictivos con las cosas que les gustan.

Comer sano y variado 

Los especialistas en nutrición suelen coincidir en la importancia del desayuno, como la comida más importante para tener la energía que los niños necesitan:

Los niños que no desayunan bien tienen mayores dificultades para concentrarse, suelen estar de peor humor y bastante decaídos. El buen desayuno desde la infancia debe establecerse como un hábito saludable. 

Asegúrate de incluir:

Cereales: Aportan hidratos de carbono, vitaminas, minerales y ,en el caso de algunos cereales, fibra. Para las mañanas de colegio son muy convenientes ya que son fáciles de servir y comer.
Lácteos. Importantes por su contenido en calcio, vitaminas A, D, B y proteínas.
Frutas. Fundamentales para el aporte de agua, hidratos de carbono, vitaminas, minerales y fibra.
Derivados cárnicos. Jamones poco grasos que aportan proteínas y energía. Por ejemplo, el jamón de pechuga de pavo. 

Inclúyelos en las compras del hogar:

Ir al mercado con tu hijo es una oportunidad para que conozcan los distintos alimentos, se familiaricen con ellos y aprendan cómo los seleccionamos, sepan cuándo los vamos a comer…

Reflexionen juntos 

Inculcar desde pequeños que hay algunos alimentos que los benefician y los ayudan a crecer es conveniente para desarrollar el hábito de comer sano. Procura conversar con ellos sobre las frutas, verduras, cereales y carnes para que se vayan acostumbrando a comerlos a diario y sepan que no excederse con las golosinas es una forma de cuidarse a ellos mismos. 

¡Utiliza estos tips y disfruta con tus hijos una dieta balanceada y saludable! Síguenos en Facebook e Instagram y encuentra más tips como estos.